Miranda de Ebro
En un primer momento, Miranda de Ebro solamente ocupaba una de las orillas del Río Ebro, pero con el paso de los años y el desarrollo de la ciudad, comenzó a expandirse hacia el otro lado.
Esto fue posible gracias a la construcción del Puente de Carlos III, uno de los puntos turísticos e importantes de la ciudad desde el que admirar unas impresionantes vistas.
Durante tu visita a Miranda de Ebro, no te puedes perder el casco antiguo de la ciudad con la Plaza de España y su Ayuntamiento, o la Iglesia de Santa María.
Haro
A 20 kilómetros de Miranda de Ebro se encuentra Haro, un pequeño pueblo de La Rioja lleno de encanto e historia.
Esta localidad es considerada como la capital de la denominación de origen Rioja. Paseando por sus calles podrás descubrir el pasado glorioso de Haro. Comienza en la Plaza de la Paz, siguiendo la calle Santo Tomás hasta llegar a la Iglesia. Después continúa por la Plaza de San Martín y por la calle del mismo nombre hasta terminar de nuevo en el comienzo de la ruta. De esta forma conocerás el casco antiguo de la ciudad y podrás disfrutar de unas deliciosas tapas en lo que se conoce como La Herradura.
Además de su casco histórico lleno de belleza e historia, en Haro encontrarás la mayor concentración de bodegas centenarias del mundo. Todas ellas surgieron gracias a la estación de ferrocarril y a una plaga de la filoxera en Francia que acabó con todos los cultivos, trasladando las bodegas a esta localidad.